TRASPLANTES DE ÓRGANOS

1. ¿Qué comunidad autónoma está a la cabeza en donaciones de riñón. Haz un cuadro comparativo, por comunidades? .




2. ¿Qué hospitales en España poseen equipos donde se realicen trasplantes de pulmón?
En España a día de hoy solo tenemos seis centros hospitalarios en los que se realicen trasplantes pulmonares, estos son:
-El Hospital Universitario Reina Sofía, Córdoba
-El Hospital Universitario Vall d’Hebron, Barcelona.
-El Hospital Universitario Puerta de Hierro, Madrid.
-El Hospital Marqués de Valcedilla, Santander.
-El Complejo Hospitalario Juan Canalejo, Coruña.
-El Hospital Universitario La Fe, Valencia.

Pero sólo se realizan estos trasplantes en Madrid y Valencia.




3. ¿Qué hace falta para hacerse donante de órganos. Donde puedo hacerlo?.
Para ser donante de órganos aparte de ser una persona dispuesta a donar y que sea por voluntad propia, también hay una serie de requisitos establecidos por la ley, entre ellos:
-Tener entre 18 a 60 años.
-Ser una persona saludable tanto física como mentalmente.
-Ser compatible con el donador (grupo sanguíneo, Rh..)
-Estar dispuesto y comprometido a realizarse una serie de exámenes antes de la operación, para documentar su buen estado de salud, así como entender la cirugía a la que se expone y a los riesgos implícitos de ésta.
-Contar con tiempo para la hospitalización y el período de recuperación.
-En caso de querer ser donante en el momento de su muerte, debe comunicarle la decisión a los familiares y amigos para que llegado el momento, ellos hagan respetar su voluntad expresada en vida.

4. ¿Cuántos donantes de órganos hubo en Castilla la mancha en 2009?.
El año pasado, en 2009, hubo en Castilla la mancha un total de 53 donantes según la organización nacional de donantes de órganos.
5. ¿Para qué se utiliza la sangre que se dona? .
Los diferentes componentes de la sangre se emplean en el tratamiento de distintas enfermedades (leucemia, cáncer...), ante hemorragias, en la elaboración de medicamentos y otros actos médicos como trasplantes e intervenciones quirúrgicas.
Dependiendo de la situación que estés necesitaras una cantidad de sangre determinada, por ejemplo:
Operación de cadera: 6 - 8 unidades.
Parto complicado: 4 - 6 unidades.
Accidente de tráfico: 20 - 30 unidades.
Aneurisma roto: 30 - 40 unidades.
Trasplante de corazón: 20 unidades.
Trasplante de hígado: 30 unidades.
Trasplante de médula ósea: 50 unidades.
6. Busca algún anuncio en prensa, de las últimas semanas, sobre la donación de órganos en España.
Centros de salud inscriben a donantes de órganos.

Sábado, 05 de Junio de 2010 10:25
EsSalud iniciará campaña de información en locales públicos, instituciones para que la persona pueda conocer sobre la donación de órganos.
ACCIÓN. EsSalud anuncia campaña para incentivar la donación de órganos.
Anteayer, se publicó en el diario oficial “El Peruano” el reglamento de la Ley 2947, que promueve la donación y trasplante de órganos, el procedimiento que faltaba para que la norma entre en vigencia.
Una de las principales disposiciones que se ratifica es la defensa de la voluntad del donante, pues la decisión de sus familiares -en caso de fallecimiento- ya no será impedimento para la extracción y trasplante de sus órganos.
La próxima semana el coordinador de la donación de órganos y tejidos de la Red Asistencial de Cajamarca, Andrés Fernández, informó que iniciarán una campaña de información en locales públicos, instituciones para que la persona pueda conocer sobre la donación de órganos, y, si está de acuerdo, llenará el acta de consentimiento.
“En caso exista una contradicción en la información consignada en el DNI y en el acta se hará valer la última declaración”, refirió Andrés Fernández.
ATENCIÓN
“MENTAL”
En otro rubro informativo, se detalla que personal especializado atenderá a pacientes con problemas de salud mental hospitalizados con depresión, ansiedad, anorexia, miastenia y otros problemas emocionales. En tal sentido, el Hospital Nacional Guillermo Almenara Irigoyen de EsSalud pondrá en funcionamiento la unidad de Psiquiatría de Enlace, a través de la cual se dará tratamiento personal y especializado a este tipo de perturbaciones.
Este nosocomio atiende con frecuencia casos de pacientes que sufren de cáncer, diabetes, hipertensión, problemas coronarios, insuficiencia renal crónica y otras enfermedades, que generan ciertos trastornos de conducta en el asegurado hospitalizado, como consecuencia de la enfermedad que padecen.
Finalmente, se detalla lo relacionado con la miastenia que es una enfermedad relativamente frecuente. Cuando no es congénito, el paciente comienza a presentar los primeros síntomas generalmente en la adolescencia: debilidad y cansancio, sobre todo. Por esa razón, suele confundirse con otras enfermedades, incluyendo la depresión. El tratamiento oportuno y adecuado es importante, pues la indiferencia puede ser fatal: terminar con un paro respiratorio.
Según el especialista en Neurología del Hospital II de EsSalud de nuestra ciudad, Juan Salazar Pajares, acota que a medida que avanza el mal se percibe en el paciente la caída de los párpados, de los músculos masticatorios, deglutorios y de la mímica facial.

BARTONELLA


Bartonella
(anteriormente conocida como Rochalimaea) es un género de bacterias Gram negativas, el único de la familia Bartonellaceae. Son parásitos facultativos intracelulares que pueden infectar a personas sanas pero normalmente son considerados patógenos oportunistas. Bartonella es trasmitida por insectos tales como garrapatas, pulgas, moscas de la arena y mosquitos. Al menos ocho especies o subespecies de Bartonella infectan a los seres humanos. En junio de 2007 se descubrió una nueva especie de este género, Bartonella rochalima que constituye la sexta especie (en total la novena especie o subespecie) que se conoce que infecta a los seres humanos.

Historia
Las especies de Bartonella han estado infectando a los seres humanos durante miles de años, como se ha demostrado al encontrar ADN de Bartonella quintana en un diente de de 4000 años de antigüedad. El género toma su nombre de Alberto Leonardo Barton Thompson, un científico peruano nacido en Argentina.
En 1999, se descubrió que Bartonella está presente en las garrapatas. Varias especies son patógenos de los humanos transmitidos por ratas.
En 2001, médicos que trataban la enfermedad de Lyme reportaron que sus pacientes también estaban co-infectados por Bartonella. Numerosos informes de este tipo parecen indicar que las garrapatas no sólo portan Bartonella sino que también son transmisores del patógeno; sin embargo, el modo de transmisión todavía no ha sido descubierto.

Ciclo de infección

El modelo de ciclo de infección actualmente aceptado sostiene que los vectores de transmisión son los artrópodos hematófagos y los reservorios son mamíferos. Inmediatamente después de la infección, las bacterias colonizan su nicho principal, las células endoteliales. Cada cinco días, se libera una parte de la población de Bartonella de las células endoteliales en el torrente sanguíneo, donde infectan a los eritrocitos. Las bacterias entonces invaden y se replican dentro de una membrana fagosomial en el interior de los eritrocitos. Las bacterias se multiplican dentro de los eritrocitos hasta que alcanzan a una densidad de población crítica. En este punto, Bartonella espera a que los artrópodos hematófagos succionen estos eritrocitos.

Patofisiología
Las infecciones por Bartonella destacan por el amplio rango de síntomas que pueden producir: la fase (aguda o crónica), además de que la patología subyacente es altamente variable.


Tratamiento
El tratamiento depende de la cepa de Bartonella que se encuentre en un determinado paciente. Aunque las especies de Bartonella son susceptibles a una serie de antibióticos estándar in vitro — macrólidos y tetraciclinas, por ejemplo, la eficacia del tratamiento antibiótico en individuos inmunodeficientes es incierto. Los pacientes inmunodeficientes deben tratarse con antibióticos ya que son particularmente susceptibles a la enfermedad sistémica y bacteremia. Entre las drogas de especial eficacia se incluyen trimetoprima-sulfametoxazol, gentamicina, ciprofloxacina y rifampicina. B. henselae es generalmente resistente a la penicilina, amoxicilina y nafcilina.

Epidemiología
El riesgo de infección, especialmente por B. elizabethae, es más alto para los vagabundos y drogadictos, seguramente por la mayor probabilidad de contacto con roedores y garrapatas. La tasa de seropositividad a B. elizabethae en esta población va desde el 12,5% en Los Ángeles, al 33% en Baltimore, Maryland,46% en New York[y 39% en Suecia.

ALZHEIMER.



Alois Alzheimer y la paciente Augusta D
La enfermedad de Alzheimer es una demencia que cuenta ya con más de 100 años de historia. En noviembre de 1901 ingresó en el hospital de enfermedades mentales de Frankfurt una paciente de 51 años de edad llamada Auguste Deter (Augusta D), con un llamativo cuadro clínico de 5 años de evolución.
Tras comenzar con un delirio celotípico, la paciente había sufrido una rápida y progresiva pérdida de memoria acompañada de alucinaciones, desorientación en tiempo y espacio, paranoia, trastornos de la conducta y un grave trastorno del lenguaje. Fue estudiada por Alois Alzheimer, y más tarde por parte de médicos anónimos. Falleció el 8 de abril de 1906 por una septicemia, secundaria a úlceras por presión y neumonía.

El cerebro de la enferma fue enviado a Alzheimer, que procedió a su estudio histológico. El 4 de noviembre de 1906 presentó su observación anatomoclínica con la descripción de placas seniles, ovillos neurofibrilares y cambios arterioescleróticos cerebrales.
El trabajo se publicó al año siguiente con el título: «Una enfermedad grave característica de la corteza cerebral». La denominación del cuadro clínico como enfermedad de Alzheimer fue introducida por Kraepelin en la octava edición de su «Manual de psiquiatría», en 1910.

Alzheimer describió su segundo caso en 1911, fecha en la que también aparece una revisión publicada por Fuller, con un total de 13 pacientes con enfermedad de Alzheimer, con una media de edad de 50 años y una duración media de la enfermedad de 7 años.
Las lesiones histopatológicas del cerebro de Augusta D han podido ser estudiadas de nuevo y publicadas en 1998 en la revista Neurogenetics. En este trabajo no se han encontrado lesiones microscópicas vasculares, existiendo solamente placas amiloideas y ovillos neurofibrilares, lesión ésta última descrita por primera vez por Alzheimer en este cerebro.


Etiología y epidemiología

La etiopatogenia de la enfermedad de Alzheimer es múltiple. Es hereditaria entre el 1% y el 5% de los casos (enfermedad de Alzheimer genética) por transmisión autosómica dominante de alteraciones en los cromosomas 1 (presenilina 2), 14 (presenilina 1) o 21 (Proteína Precursora de Amiloide, APP), con una edad de presentación generalmente anterior a los 65 años.

Factores genéticos en la enfermedad de Alzheimer




* Mutaciones que explican los casos de enfermedad de Alzheimer familiar de comienzo temprano (1-5 % de casos):


o Gen de la Proteína Precursora de Amiloide (APP; OMIM —herencia mendeliana humana en línea— *104760), cromosoma 21.

o Gen de la Presenilina 1 (PSEN1; OMIM *104311), cromosoma 14.

o Gen de la Presenilina 2 (PSEN2; OMIM *600759), cromosoma 1.




* Polimorfismos (variantes genéticas) que pueden incrementar la susceptibilidad de padecer enfermedad de Alzheimer esporádica (90-95% de todos los casos):


o Confirmados:


+ Alelo ε4 del gen de la Apolipoproteína E (APOE), (cromosoma 19).




o No confirmados universalmente (resultados variables en los estudios de réplica):


+ Gen de la α-2 macroglobulina.

+ Gen del receptor de lipoproteínas de muy baja densidad
(VLDL).

+ Gen de la α-1 antiquimiotripsina.

+ Gen de butirilcolinesterasa K.

+ Gen de ubiquitina.

+ Gen de la proteína τ.

+ Genes mitocondriales (citocromo-oxidasas I y II).

+ Genes de las interleucinas 1A y 1B.

+ Otros, hasta unos setenta genes.

En el resto de los casos (enfermedad de Alzheimer compleja o esporádica) la etiología es multifactorial con diversos factores de riesgo, que incluyen la predisposición genética (evidenciada porque aumenta la frecuencia si se tiene un pariente en primer grado con la enfermedad, y más aún si son varios), la edad (es más frecuente a partir de los 65 años, a partir de los cuales el riesgo se duplica cada 5 años) y factores de riesgo exógenos, ambientales, que parecen favorecer su desarrollo, como ocurre con los traumatismos craneoencefálicos graves.

En el Alzheimer esporádico, ni los factores genéticos ni los ambientales por separado provocan la enfermedad. Los factores genéticos y ambientales asociados entre sí son necesarios, pero no suficientes, precisando además del concurso del factor envejecimiento.
La enfermedad de Alzheimer es más frecuente en los sujetos portadores del alelo ε4 de la Apolipoproteína E (APOE, cromosoma 19), especialmente en los casos homocigóticos para dicho alelo. Por el contrario, se ha postulado un efecto opuesto para el alelo ε2 de la misma APOE, que tendría por tanto un papel protector.
Cada vez es más abrumadora la evidencia epidemiológica de que los factores de riesgo vascular (diabetes, hipertensión arterial, dislipemias, dietas ricas en grasas, tabaquismo...), y otros como la intoxicación crónica leve por metales como el cobre, favorecen también el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer en las personas genéticamente predispuestas.

Muchos de esos factores son controlables mediante la dieta, el mantenimiento de un peso corporal adecuado y algunos medicamentos, lo que incrementa su importancia epidemiológica.
Lo mismo puede decirse de la llamada «Reserva Cognitiva». Los sujetos con mayor capacidad cognitiva natural y adquirida (cociente intelectual, cultura, estudios académicos, participación en actividades intelectuales y de esparcimiento como juegos de mesa, baile...) presentan la enfermedad más tarde que los sujetos con menor Reserva Cognitiva, a igual cantidad de lesiones histopatológicas cerebrales típicas de enfermedad de Alzheimer presentes en sus cerebros.
Dos personas pueden tener la misma cantidad de lesiones histopatológicas de enfermedad de Alzheimer, pero una de ellas puede mostrarse mucho más demenciada que la otra. La idea que hay detrás de la Reserva Cognitiva es que el cerebro intenta compensar activamente a la histopatología. Las personas pueden, por ejemplo, compensarse mejor mediante la utilización de redes cerebrales alternativas, o más eficientes, pudiendo funcionar con más normalidad pese a su histopatología.

También se ve afectada por la edad la prevalencia, que es de un 0,02% en el tramo de edad de 30 a 59 años, y pasa a ser de un 10,8% para el tramo comprendido entre los 80 y los 89 años.


Anatomía patológica e histología


En la enfermedad de Alzheimer se produce una atrofia cerebral progresiva, bilateral y difusa, que comienza en regiones mesiales temporales para afectar luego al neocórtex, sobre todo al temporal, parietal y frontal. Se producen la lesión y posterior destrucción de la neurona cerebral, en relación con la aparición tanto de depósitos insolubles extracelulares (placas amiloides, figura de la derecha) como intracelulares.

El elemento fundamental de los depósitos extracelulares es la proteína β-amiloide, que forma fibrillas y se agrega constituyendo las placas difusas y las placas neuríticas, estas últimas con núcleo denso y presencia de neuritas distróficas β-APP+ (proteína precursora de β-Amiloide inmunopositiva). El β-amiloide se produce por una escisión anómala de la APP (proteína precursora de amiloide). Cuando la APP es escindida por la α-secretasa, que es la vía normal, el producto resultante es un péptido soluble, eliminado después por el organismo con facilidad.

Pero en la enfermedad de Alzheimer predomina la escición consecutiva de la APP por parte de la β-secretasa primero, y de la γ-secretasa después, formándose entonces el péptido β-amiloide, insoluble, que las neuronas excretan a su exterior. A continuación, las células de la glía (astrocitos y microglía) intentan sin éxito la eliminación del β-amiloide, generándose un proceso inflamatorio que, junto con el propio efecto tóxico del β-amiloide, contribuye a lesionar a las neuronas.

En cuanto a los depósitos intracelulares, constituyen la degeneración neurofibrilar, cuyo principal componente es la proteína tau (τ). La proteína τ normal forma los "puentes" que mantienen correctamente unidos los microtúbulos que conforman el citoesqueleto neuronal, pero en la enfermedad de Alzheimer (en parte por la acción tóxica del β-amiloide) se produce una hiperfosforilación anómala de la proteína τ, desensamblándose el citoesqueleto y dando lugar a la degeneración neurofibrilar, con la formación de los ovillos neurofibrilares.

Los dos tipos de lesiones (placas neuríticas y ovillos neurofibrilares) se pueden encontrar también en el cerebro de ancianos sanos, y lo que en realidad marca el diagnóstico histopatológico es su cantidad y localización, correlacionándose su número y densidad con la intensidad de la demencia en estos pacientes.

Clínica

Los 10 signos de alarma de la enfermedad de Alzheimer que difunde la Alzheimer's Association de los Estados Unidos y que recogemos bajo estas líneas, pueden ponernos en guardia al sugerirnos que una persona quizás esté iniciando esta enfermedad, de comienzo habitualmente insidioso.

El motivo de consulta suele ser la pérdida de memoria, especialmente de la memoria reciente. No recuerda el paciente dónde ha dejado las cosas (incluyendo objetos de valor), olvida citas, recados, se deja grifos abiertos y fuegos encendidos, y no recuerda a las personas que acaba de conocer, ni es capaz de aprender a manejar los nuevos electrodomésticos.

Los 10 signos de alarma de la enfermedad de Alzheimer
Reproducido de la Alzheimer's Association


* Pérdida de memoria que afecta a la capacidad laboral.

* Dificultad para llevar a cabo tareas familiares.

* Problemas con el lenguaje.

* Desorientación en tiempo y lugar.

* Juicio pobre o disminuido.

* Problemas con el pensamiento abstracto.

* Cosas colocadas en lugares erróneos.

* Cambios en el humor o en el comportamiento.

* Cambios en la personalidad.

* Pérdida de iniciativa.

Repite una y otra vez las mismas cosas y hace una y otra vez las mismas preguntas, y tiene dificultades para encontrar la palabra adecuada en una conversación, utilizando parafasias y circunloquios. El rendimiento laboral es cada vez más pobre, y comienza algo más adelante a presentar ideas delirantes, culpando a familiares de esconderle o quitarle las cosas.

Luego su aspecto comienza a dejar de preocuparle, y cada vez le cuesta más trabajo seguir una conversación, quedándose con frecuencia sin saber lo que iba a decir. Empieza ya a retraerse, tendiendo a dejar de salir y a abandonar sus aficiones habituales. Aparecen episodios de desorientación espacial, que inicialmente se refieren solo a los lugares menos familiares.

Su percepción de la realidad es cada vez más pobre, y el cuadro evoluciona ya con rapidez hacia la demencia grave. Tiene entonces dificultades para vestirse, asearse, manejar cubiertos de manera adecuada, duerme mal, está hiperactivo (pero sin finalidad determinada), y a veces se orina en la cama.

Pueden aparecer crisis epilépticas y mioclonías, y el paciente camina con lentitud, con el tronco flexionado. Orina y defeca en lugares inapropiados, apenas emite algunas palabras ininteligibles y tiene intensos trastornos del sueño y del comportamiento. Finalmente llega a no poder andar y a no comunicarse en absoluto, y fallece a causa de los procesos intercurrentes (úlceras por presión que se infectan, neumonías...).

La exploración ayudará a descartar otras enfermedades sistémicas y neurológicas, y a continuación hay que confirmar los déficits cognitivos recogidos en la anamnesis, y determinar su repercusión sobre la vida social y laboral del paciente. Se exploran la orientación, concentración, memoria, lenguaje, praxias, función ejecutiva...

Diagnóstico

Los criterios diagnósticos de demencia de tipo Alzheimer del DSM-IV-TR (Texto revisado de la cuarta edición del manual diagnóstico y estadístico de la Asociación Americana de Psiquiatría) o los de enfermedad de Alzheimer probable del NINCDS-ADRDA (National Institute of Neurologic, Communicative Disorders and Stroke - Alzheimer's Disease and Related Disorders Association) deberían ser los utilizados de manera rutinaria para la enfermedad de Alzheimer. Encontrará más información en nuestra página de criterios diagnósticos de las demencias.

Las siguientes pruebas complementarias deben realizarse de forma rutinaria:

Determinaciones en sangre y orina: glucosa, urea, creatinina, sodio, potasio, calcio, ácido úrico, colesterol, triglicéridos, aminotransferasas, gamma-glutamiltranspeptidasa (gamma-GT), fosfatasa alcalina y albúmina, además de pruebas de función tiroidea y niveles de vitamina B12. Hemograma completo. Serología de lúes sólo si el paciente tiene factores de riesgo específicos, aunque la Sociedad Española de Neurología recomienda su realización rutinaria. Análisis elemental de orina.

Pruebas de imagen: Tomografía Axial Computarizada (TAC) o Resonancia Nuclear Magnética (RNM) craneales.

Punción lumbar: solamente en caso de sospecha de infección del Sistema Nervioso Central (SNC), serología de lúes positiva, hidrocefalia, edad inferior a 55 años, demencia inusual o rápidamente progresiva, inmunosupresión, sospecha de vasculitis del SNC o presencia de enfermedad metastásica.

Electrocardiograma y radiología simple de tórax.

Electroencefalograma: sólo si existe historia de convulsiones, pérdida de consciencia, episodios de confusión o deterioro clínico rápido.

Las estrategias de medición linear o volumétrica mediante TAC o RNM no se recomiendan de manera rutinaria en la actualidad, ni la tomografía de emisión de positrones (PET). Tampoco la tomografía computarizada de emisión de fotón único (SPECT) cerebral se recomienda de manera rutinaria en el diagnóstico inicial o diferencial, ya que no ha demostrado superioridad sobre los criterios clínicos.

El estudio rutinario del genotipo APOE no se recomienda actualmente en los pacientes con sospecha de enfermedad de Alzheimer, ni tampoco el de otros marcadores genéticos. No hay marcadores del líquido cefalorraquídeo (LCR) ni otros marcadores biológicos recomendados para el uso rutinario en el diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer en estos momentos.
Tratamiento

A. Tratamiento específico


Inhibidores de la colinesterasa: Se han demostrado efectos terapéuticos significativos con varios de ellos en la enfermedad de Alzheimer, indicando que son agentes mejores que el placebo de manera consistente. Sin embargo, la enfermedad sigue progresando a pesar del tratamiento, y la magnitud de la eficacia promedio es modesta (un retraso de entre 2 y 7 meses en el patrón progresivo de la evolución). Se han detectado con ellos cambios globales cognitivos, de comportamiento y funcionales.

Hasta ahora no se han llevado a cabo estudios comparativos cara a cara entre estos agentes, y las diferencias principales entre ellos están en los perfiles de efectos colaterales y en su sencillez de administración. Están autorizados para su uso clínico por la Food and Drug Administration (FDA) la tacrina, el donepezilo (o donepecilo), la rivastigmina y la galantamina (escritos aquí por orden de aparición en el mercado).

Memantina: Se trata de un antagonista no competitivo de los receptores NMDA (N-metil-D-aspartato), y actúa uniéndose en ellos al mismo lugar que fisiológicamente lo hace el magnesio, pero con mayor afinidad. Esto bloquea la entrada masiva de calcio que se produce en las células nerviosas cuando existe una excesiva actividad del glutamato que provoca el desplazamiento del magnesio.

La memantina ha sido aprobada ya para uso clínico por la Unión Europea y por la FDA de los Estados Unidos. La indicación aprobada actualmente de manera oficial es en los casos moderados, graves y moderadamente graves (estadios 5, 6 y 7 de la GDS -Global Deterioration Scale- de Reisberg), pero ya hay estudios en marcha para conseguir su aprobación para los casos leves. Asimismo, parece ser eficaz en la demencia vascular y podría tener efectos neuroprotectores, pero todo esto necesita aún de más estudios que lo corroboren.

Selegilina y vitamina E: Han demostrado eficacia en producir un cierto retraso en la evolución de la enfermedad tanto la vitamina E (a dosis de 1000 unidades internacionales (U.I.) dos veces al día) como la selegilina (a dosis de 5 mg dos veces al día), retrasando asimismo la institucionalización de los pacientes. No hay efecto aditivo entre ellos, no debiendo prescribirse simultáneamente. La vitamina E es mejor tolerada que la selegilina. Ninguno de estos dos agentes ha demostrado producir mejoras en el plano cognitivo.

Prednisona y estrógenos: Pese a que varios estudios epidemiológicos sugieren efectos protectores frente al desarrollo de enfermedad de Alzheimer por parte de esteroides y estrógenos, hasta ahora los ensayos clínicos llevados a cabo para corroborarlo han arrojado resultados negativos.

Antiinflamatorios no esteroideos: Un estudio prospectivo sobre 6989 personas de más de 55 años (de los que 293 desarrollaron enfermedad de Alzheimer durante un seguimiento de 6.8 años) ha demostrado una menor incidencia -estadísticamente significativa- de enfermedad de Alzheimer en los sujetos con un período de tratamiento acumulado de dos o más años con antiinflamatorios no esteroideos. Podrían tener eficacia en este sentido especialmente los antiinflamatorios no esteroideos con efecto inhibidor de la beta-secretasa.

Estatinas: Varios estudios epidemiológicos retrospectivos sugieren una menor incidencia (en torno a un 70% menos de media) de enfermedad de Alzheimer entre sujetos que estaban tomando estatinas como tratamiento para controlar su colesterol. De aquí podría deducirse también un efecto de la toma de estatinas sobre la progresión de la enfermedad de Alzheimer.

El mecanismo no está aún claro, aunque algunos estudios parecen indicar que las estatinas estimulan la vía de la α-secretasa para la escisión de la Proteína Precursora de Amiloide. Un estudio comunicado en la 54ª Reunión Anual de la A.A.N. (Academia Americana de Neurología) de abril de 2002, realizado sobre un total de 2581 sujetos, viene a corroborar una asociación estadísticamente significativa entre el tratamiento con estatinas y una menor incidencia de enfermedad de Alzheimer.

Ginkgo biloba: los datos sobre su posible eficacia son muy limitados, y en los pocos ensayos aleatorios que se han llevado a cabo la eficacia resulta ser menor que la típica obtenida con los anticolinesterásicos.

B. Tratamiento de los síntomas psicológicos y conductuales

Estos trastornos asociados a la enfermedad de Alzheimer (ansiedad, depresión, agitación, trastornos del sueño, etc.) obligan a valorar profundamente al paciente antes de prescribir ningún medicamento, pues muy frecuentemente son secundarios a causas orgánicas, desde un dolor cuya cualidad y localización no nos sabe describir el enfermo, hasta un simple estreñimiento. En estos casos, el tratamiento de la enfermedad causal resolvería también el trastorno psicológico o conductual.

Deberían utilizarse antipsicóticos para tratar la agitación o la psicosis en enfermos con demencia siempre que fallen los medios de manipulación del entorno. Los agentes atípicos (como la risperidona, la quetiapina o la olanzapina) pueden ser mejor tolerados en comparación con los agentes tradicionales como el haloperidol.

Sin embargo, en varios estudios se ha informado de una mayor incidencia de ictus y muerte entre los ancianos con edad muy avanzada y demencia tratados con algunos de estos agentes, que deberían ser utilizados a las dosis más bajas posibles y durante el mínimo tiempo necesario. En los pacientes con enfermedad de Alzheimer tratados con inhibidores de la colinesterasa parece demostrada una menor necesidad de antipsicóticos que en los no tratados.

En el tratamiento de la depresión en individuos con demencia puede considerarse el uso de antidepresivos como los inhibidores de recaptación de la serotonina (fluoxetina, citalopram, paroxetina...), mejor tolerados que la amitriptilina, que tiene efecto anticolinérgico. En cualquier caso el perfil de efectos colaterales guiará la elección del agente más idóneo para cada paciente. La trazodona, con ligero efecto sedante y sin efecto anticolinérgico alguno, puede ser muy útil, especialmente cuando a la depresión se asocian agitación e inquietud.

La ansiedad puede requerir el uso de ansiolíticos, siendo preferibles los de acción corta (como el alprazolam) a los de acción intermedia (como el bromazepam) o larga (como el diazepam). Deberemos esperar además al efecto de los anticolinesterásicos que se hayan podido empezar a administrar al paciente, pues es frecuente que ellos solos ya mejoren estos trastornos en estos pacientes. Los ansiolíticos se deben utilizar solamente durante cortos períodos de tiempo, y su retirada debe ser progresiva, especialmente con los de acción más prolongada.

Los trastornos del sueño pueden ser tratados con benzodiacepinas (como el lorazepam, el lormetazepam, el zolpidem o el triazolam), con clometiazol o bien con algún neuroléptico (como la levomepromazina, que es una fenotiazina).

C. Tratamiento no farmacológico

Las medidas generales de tratamiento no farmacológico de las demencias son también de aplicación en la enfermedad de Alzheimer.

SEGUIMIENTO DEL TERREMOTO DE HAITI 2

1.¿Se podía preveer este seísmo?
No se podía preveer con exactitud aunque ya sabían que pronto se produciría ya que existe una gran energía acumulada bajo la zona caribeña y norteamerica. La falla Enriquillo, donde se ha producido, fue una de las cuatro fallas que relacionaron con un posible terremoto los expertos internacionales.
2.Número de víctimas que van apareciendo. Seguimiento. El número de víctimas por el terremoto de Haití a día de hoy asciende a 75.000.
3.Que repercusión social, sobre la población, está teniendo. Qué se está haciendo con las victimas, qué con los supervivientes. ¿El futuro del país a medio plazo? Los supervivientes de la catástrofe pasan la noche y el día como pueden en la calle esperando la ayuda internacional.
Las víctimas que cada vez son más y más, el futuro del país corre el riesgo de otros países africanos "que después de 10 o 15 años de sufrir una tragedia similar siguen con las estructuras provisionales, con campos de refugiados, con las mismas instalaciones que se montaron para paliar el grave problema".
La situación económica, administrativa y social de Haití empeorara tras sufrir este terrible terremoto.
4.Situación sanitaria en estos momentos
A la ya deteriorada situación de salud existente en Haití se suma hoy el gran desafío de atender a los miles de sobrevivientes del terremoto que asoló hace unos días a ese país caribeño.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2009, el 45 por ciento de la población carecía de agua potable y más del 80 por ciento tenía problemas para acceder a la atención de salud.
Debido a esto, Haití se sitúa como una de las naciones de más alta tasa de mortalidad por VIH/sida, diarrea y tuberculosis en el hemisferio occidental.


La réplica más fuerte

Un nuevo seísmo de 6,1 grados Ritcher sacudió hoy el oeste de Haití, incluida la capital, sin que parezca haber causado nuevas víctimas, mientras la desesperación cunde entre la población tras ocho días viviendo a la intemperie y en muchos casos sin alimentos. A las 6.03 de la mañana, justo antes del amanecer, un ruido sordo despertó a los que dormían y el suelo y las paredes comenzaron a temblar.

SEGUIMIENTO DEL TERREMOTO DE HAITI

1.Localización:


2.Epicentro:
El epicentro fue localizado a 15 metros de la capital de Haiti (Puerto príncipe).
3.Magnitud: La magnitud del terremoto fue de 7,3 grados y con una profundidad de 10 km.

16/11

1.Siguiendo a un volcán. Explica de manera breve y sintética los tecnicismos utilizados.

Sistema de fallas: conjunto de fallas, y una falla es una discontinuidad que se forma en las rocas superficiales de la Tierra (hasta unos 200 km de profundidad) por fractura, cuando las fuerzas tectónicas superan la resistencia de las rocas.
Fisura profunda: es una hendidura en una roca. Se distinguen dos tipos de fisura: de estratificación, que es la que separa dos capas o estratos de una misma roca, y de superposición, que es la que separa dos capas de diferente naturaleza que se hallan superpuestas.
Línea de falla: la línea de contacto entre el labio inferior y el plano de falla.
Placas tectónicas: es un fragmento de litosfera que se desplaza como un bloque rígido sin presentar deformación interna sobre la astenosfera de la Tierra.
Geológicamente inestable: es una estructura terrestre que puede presentar alteraciones en distintas zonas.
Magma: es una mezcla multifase de alta temperatura de sólidos, líquido y gas, formado por la fusión parcial o total de una fuente parental. Por su contenido mineral, el magma puede clasificarse en dos grandes grupos: máficos y félsicos.
Temblores armónicos: son temblores de vibración continua que puede prolongarse por varias horas con amplitudes regulares y que muestran un contenido de frecuencia más o menos estable. Su origen aún no ésta completamente explicado, aunque se piensa que deben a la oscilación continua de elementos del aparato volcánico, o al desplazamiento de magma.
Bomba volcánica: son glóbulos de roca fundida cuyo tamaño iguala o supera los 64 mm de diámetro.
Bomba Volcánica de aproximadamente 500mm expuesta en una de las subidas al Teide en Tenerife, España.
Se forman cuando un volcán expulsa fragmentos viscosos de lava durante una erupción. Las bombas volcánicas pueden ser lanzadas a kilómetros de distancia de la boca de erupción. Durante el vuelo, las más fluidas suelen adquirir formas aerodinámicas (trenzas o husos), a la vez que se enfrían en mayor o menor grado. Si el exterior de una bomba de lava solidifica durante su vuelo, puede desarrollar una superficie externa agrietada a medida que se expande desde el interior. Este tipo de bomba de lava se conoce como bomba de corteza de pan. Si la bomba sigue en estado plástico, en el impacto a tierra se deforma (plasta de vaca). Las bombas volcánicas representan un peligro significativo ya que pueden causar graves daños por impacto, quemadura e incendio en la zona de la erupción y proximidades. Un incidente de este tipo ocurrió en el volcán de Galeras en Colombia en 1993, donde seis personas resultaron muertas cerca de la cumbre y varias sufrieron heridas severas por las bombas de lava cuando el volcán entró en erupción de forma inesperada.

Ceniza (volcánica): es una composición de partículas de roca y mineral muy finas (de menos de 2 milímetros de diámetro) eyectadas por un viento volcánico.
La ceniza se genera a partir de la roca cuarteada y separada en partículas diminutas durante un episodio de actividad volcánica explosiva. La naturaleza normalmente violenta de una erupción, incluyendo chorros de vapor de agua, produce como resultado una gran cantidad de magma y tal vez roca sólida que rodea el viento volcánico, torneando las partículas hasta reducirlas al tamaño de granos de arena.

Tubo de lava: Son cuevas volcánicas, usualmente con forma de túneles, formados en el interior de coladas lávicas más o menos fluidas mientras dura la actividad reo genética. Por su génesis, son cavidades primarias, y se clasifican como singenética, reogenéticas y subterráneas. Pueden adquirir una estructura simple de tubo lineal, o llegar a formar complejas redes de ramales interconectados, también a distintos niveles y con dimensiones que abarcan desde unos pocos centímetros hasta varias decenas de metros.

Se trata de un tipo de cueva muy común, pues el mecanismo de su formación es frecuente en la mayoría de coladas de lava. De hecho, es muy probable que en otros planetas y cuerpos celestes con actividad volcánica existan tubos volcánicos con características similares a los que conocemos.

2 Volcanes en España. Localiza los volcanes activos en España, y busca información sobre el año de su última erupción, así como las consecuencias de la misma .

Uno de los volcanes activos en España es El Teide en 1909, en la isla de Tenerife. Su última erupción tuvo lugar en el interior del Parque del Teide, en las laderas de Pico Viejo se abrieron una serie de bocas, las denominadas “Narices del Teide”, que durante tres meses derramaron enormes cantidades de lava cubriendo una gran superficie de terreno y dando lugar a los sugestivos malpaíses del oeste del Parque.

El Volcán de Teneguía ha sido la última erupción volcánica en España. Tuvo lugar en el volcán de Cumbre Vieja, en la isla de La Palma, Canarias, en 1971.
Su nombre proviene de un roque cercano muy famoso que contiene petroglifos auritas. Antes de entrar en erupción se habían producido numerosos terremotos cuya intensidad iba en aumento, lo que alertó a los vecinos de Fuencaliente de la Palma, surgió el volcán. La erupción duró desde el 26 de octubre de 1971 hasta el 18 de noviembre de ese año. Fue una erupción relativamente corta, la más corta de las históricas de Canarias, sobre todo si se la compara con la que duró 6 años en Lanzarote en el siglo XVIII.
En tiempos históricos han tenido lugar 16 erupciones volcánicas documentadas, ninguna de ellas con víctimas mortales. Esto ha sido posible por la baja densidad demográfica y por la fluidez de las lavas que se emiten en los volcanes canarios. El volcán produjo daños materiales a los cultivos de vid de la zona y destruyó una playa, aunque luego se formó otra gracias a sus coladas. No afectó a las zonas pobladas y gracias a la cercanía de la costa, la lava vertida al mar, solidificándose, hizo crecer un poco el tamaño de la isla.
El volcán se convirtió en un atractivo turístico, y numerosos vuelos chárter y frecuencias especiales fueron programadas para cubrir la demanda de pasajes de los turistas que querían ver el volcán. También fue un foco importante de atención y estudio para los científicos de la época.